Photography and postcards, 2017
Lamias and Samodivas are female figures from Slavic folklore who appear in the forests of Bulgaria. Stories belonging to the oral culture of each region.
Samodivas are forest fairies, winged goddesses who live in the hollows of trees, in abandoned huts or dark caves, near rivers or wells, have healing powers and bless the crops.
Lamias are female dragons with the head of a dog and a large mouth, some have 3 to 9 heads, with sharp teeth and a long snake tail. They appear in the form of a storm or mist and destroy crops.
Lamias
Fotografía y postales, 2017
Las Lamias y las Samodivas son figuras femeninas del folklore eslavo que aparecen en los bosques de Bulgaria. Historias pertenecientes a la cultura oral de cada región.
Las Samodivas son hadas de los bosques, diosas aladas que viven en los huecos de los árboles, en chozas abandonadas o cuevas oscuras, cerca de los ríos o pozos, tienen poderes curativos y bendicen las cosechas.
Las Lamias son mujeres dragón con cabeza de perro y una gran boca, algunas tienen de 3 a 9 cabezas, con dientes afilados y una larga cola de serpiente. Aparecen forma de tormenta o niebla y destrozan los cultivos.
During a week's residency at the Lomea Art Symposium in the Rusenski nature park on the border between Bulgaria and Romania, I wandered through the canyons, forests, rivers and caves in search of these mythological beings.
During the day I learned to draw their names in Cyrillic in the garage of the residence and at night I was able to summon them by light in the forest.
I took photographs in a number of possible locations of their habitats, images that I produced as postcards, which could be sent on condition that a story was told in reference to the being they referred to. In the caption there is an inscription in Cyrillic that states "if you take one of these postcards send it explaining the story of a Lamia or Samodiva".
Durante una semana de residencia en el marco de Lomea Art Symposium, en el parque natural de Rusenski, en la frontera entre Bulgaria y Rumanía, estuve recorriendo los cañones, bosques, ríos y cuevas buscando a estos seres mitológicos.
De día aprendí a dibujar con luz sus nombres en cirílico en el garage de la residencia para por la noche, poderlas invocar con luz en el bosque.
Realicé fotografías en una serie de localizaciones posibles de sus hábitats, imágenes que produje como postales, que se podían enviar con la condición que se explicase una historia en referencia al ser que hacían referencia. En el pie de foto hay una inscripción en cirílico que indica “si coges una de estas postales envíala explicando la historia de una Lamia o Samodiva”.
At a feast and meeting of folk cuisine in the Rusensky natural park I invited its attendees to send postcards with their stories about Lamias and Samodivas.
En una fiesta y encuentro de cocina popular en el parque natural de Rusensky invité a sus asistentes a enviar postales con sus historias sobre Lamias y Samodivas.